THE KONJAC SPONGE
Cómo usar: Antes de usar, enjuaga y satura completamente tu esponja Konjac en agua tibia. Exprime el exceso de agua y limpia suavemente la piel. Masajea con movimientos circulares para exfoliar, refrescar y acondicionar suavemente la piel. No es necesario usar productos de limpieza, pero se puede agregar una pequeña cantidad de limpiador a tu esponja Konjac si lo deseas. Si se agrega un limpiador, la esponja ayudará a que el producto trabaje más y vaya más allá.
Cuidado de la esponja Konjac : después del uso, enjuaga bien la esponja y deja que se seque en un lugar ventilado entre usos. Ten cuidado de no exprimirla, ya que esto puede dañar las delicadas fibras vegetales. Simplemente aprieta la esponja entre tus manos. También puedes meter tu esponja limpia en el refrigerador para mantenerla fresca, lo que ayudará a que dure aún más.